«En todo hay magia, solo hay que saber verla»

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¿Crees en la magia? ¿Te crees capaz de generarla y de disfrutarla? La bruja Sabrina Expósito nos ofrece las herramientas necesarias para conseguirlo a través de diferentes rituales en su libro Feliz por arte de magia (Vergara). Charlamos con ella para conocer qué es ser una bruja en nuestros días, cuáles son los rituales que nos propone, cuáles son los objetivos al llevarlos a la práctica y si todo el mundo puede realizar estos rituales. 

 

Este es tu segundo libro. ¿Nace respondiendo a una necesidad tuya o a las demandas de tus seguidores?

A las demandas de mis seguidores (sonríe). En un principio yo era un poco reacia a publicar libros porque no me considero una maestra de nada. Pero los seguidores de mi web me lo pedían continuamente. Pedían que toda la información que comparto a diario la transmitiera y la pusiese en las páginas de un libro para que ellos tuviesen mayor facilidad para consultarlas. Entonces me vi un poco forzada a sacarlo, aunque es algo que quise hacer y que ha sido muy gratificante, para satisfacerles a ellos. Así nació el primer libro («Mi libro de magia») que es autoeditado por completo, muy diferente físicamente a este segundo donde ya hay un trabajo editorial importante. El primero está cargado de mucho contenido, de mucha información, y este segundo es la parte práctica, está lleno de rituales, ejercicios que es realmente lo que pide la gente, el poder llevar a la práctica todos los conocimientos.

 

Llama la atención en el libro la “normalidad” con la que hablas de la magia, de los rituales.

Es que realmente desde el principio de la humanidad los rituales y la conexión con la naturaleza siempre ha sido algo muy normal. Aunque después, por diferentes condiciones religiosas, lo pusieron un poco en el lado más oscuro, cargándolo de cierta “anormalidad” basada en supersticiones, en miedos. Pero realmente la magia es algo muy natural porque está muy vinculada a la naturaleza. Los rituales utilizan productos naturales, por lo que todo debería estar más normalizado sobre todo para que esos miedos, esos tabúes se queden atrás y se vuelva a recuperar la costumbre de relacionar los rituales con algo bonito, con algo sagrado y con algo que es bueno para ti, para tu propia salud emocional y física.

 

Justo antes de explicar los rituales hablas de esos beneficios. ¿Cuáles son los más destacados?

Sobre todo el poder dedicarte a ti mismo, a conectar contigo mismo, parar el ritmo frenético de cada día, el estrés, dejarlo a un lado y conectar con tu propio cuerpo, con tu propio bienestar. Lo más significativo es poder parar y disminuir el estrés diario.

 

“Conviene realizar rituales o algún acto mágico desde el merecimiento y no desde la necesidad”

 

¿Cualquiera puede hacer un ritual?

Sí, sí. Además yo soy muy partidaria de incitar a hacerlo. Incluso a los niños que son pura magia, son energías muy puras, son todo luz, y les animo a participar en los rituales que puedan. La conexión con la naturaleza, con las plantas, con las piedras, los minerales, para ellos es algo natural. Todos nacemos con la necesidad de sentir el contacto con la naturaleza, pero con los años y el contacto con el mundo más material nos apartamos un poco de esa conexión. Por eso siempre insisto en que los niños mantengan esa magia innata y que no la pierdan. Y, sí, todo el mundo es capaz de hacer un ritual y todo el mundo debería sentirlo alguna vez.

 

Leyendo el libro uno se da cuenta de que no tiene por qué ser algo complicado de practicar.

Con el libro quiero facilitar su práctica y, sobre todo, que el lector tenga confianza en sí mismo. No son rituales cerrados o complicados, sino que invito a que cada uno experimente. Sabiendo que esto es bueno para esto, y esto también lo es, invito a que cada uno practique sus propias recetas. Conociendo las propiedades de cada elemento, adáptalo a lo que tú tienes a tu alrededor. Por ejemplo, si para hacer una limpieza no tienes limón, pues utiliza vinagre o sal, o cualquier otro elemento que tengas en casa y que también sirva para lo mismo. Las recetas del libro no son algo cerrado, son una guía a partir de la cual dejar que tu intuición se desarrolle y puedas practicar tu propia magia, esa que cada uno lleva en su interior.

 

“Los rituales son algo bueno para tu salud emocional y tu salud física”

 

¿Qué es la magia Sabrina?

Para mí la magia lo es todo, en todo hay magia, solo hay que saber verla. No te hablo solo de los movimientos energéticos que tú puedas realizar, es que todo es magia. Ver nacer una planta es magia, el ver cómo tú mismo te vas transformando a lo largo de los días o de los minutos de un mismo día es magia, un cambio energético que hay que saber aceptar.

 

Igual que decías que todos podemos practicar esos rituales, ¿todos estamos preparados para ver esa conexión, para sentir lo que tú describes como magia?

Por desgracia no. Me gustaría decirte que sí, pero no. Hay mucha gente que aunque realice esos rituales sigue auto limitándose. Es lo que te comentaba sobre el propio miedo a hacerlo mal. Un ritual nunca lo vas a hacer mal, siempre lo digo y es así, si ha salido de ti, de tu interior y de tus propias intenciones. Aún queda ese pensamiento de que si no haces algo estrictamente como se te marca, está mal. Es una enseñanza muy arcaica, tanto como el sistema educativo que tenemos en nuestro país en el que todo hay que aprenderlo de memoria dejando a un lado tu propia creatividad. Y eso es un pensamiento muy arcaico que hay que hay que dejar atrás y abrirse a confiar más en ti y en tus posibilidades. Por desgracia no todo el mundo está preparado para realizarlo porque no confía en sí mismo.

 

Pensamos que el ritual se practica para conseguir algo para nosotros mismos, pero ¿su beneficio puede ir más allá y afectar a otros?

No es solo en beneficio de quien lo hace porque esas energías afectan o benefician a las personas que hay a tu alrededor. Si tus energías están en un estado óptimo evidentemente que afectarán a los que están a tu lado.

 

¿Cuándo o por qué no debemos practicar un ritual?

Generalmente recomiendo que cuando estés muy desesperado no debe hacerse, cuando lo hagas más por necesidad que por placer, no lo hagas porque solo generas energías que no son beneficiosas, sino que serán contraproducentes porque te generarán nerviosismo, ansiedad, querer conseguir algo ya y el mundo de las energías no funciona así. Todo requiere un tiempo de espera, de maceración, y el sentimiento de necesidad de necesidad fuerza un poco a que las cosas no vayan bien. Por eso yo siempre recomiendo que para realizar rituales o algún acto mágico, algún movimiento energético siempre lo hagas desde el merecimiento y no desde la necesidad. Es decir, pensar yo merezco conseguir esto o sentirme así, pero no desde el yo necesito tener esto o necesito ser así.

 

¿Cómo es ser una bruja en nuestra época?

La verdad es que todo depende de cómo te lo tomes. Yo soy madre, tengo dos niñas, cuido de ellas, trabajo, voy al supermercado, veo a mis amigos… mi vida es muy normal. Sí que cada día dedico un tiempo a disfrutar de la naturaleza o a mirar la luna. Ya está normalizado en mi vida. Aún así es difícil aún decir que eres bruja cuando alguien te pregunta a qué te dedicas. Por eso depende de quién tenga enfrente respondo: “Hola soy bruja”. O “hola soy artesana” (sonríe). Más que nada porque no tengo la necesidad de estar dando explicaciones a todo el mundo y también no todo el mundo merece que les des explicaciones. Pero siempre intento aportar un poquito de luz a todo el mundo.

 

Para terminar, y aunque hay muchos rituales en tu libro, ¿puedes darnos una receta con la que conseguir de forma básica esa tranquilidad, esa conexión en nuestro día a día?

Pues algo tan sencillo como tener una planta aromática en tu casa, la que más te guste, y cada mañana coger una de sus hojitas, olerla y guardarla en tu bolsillo. Algo tan sencillo como esto. Cualquier planta aunque para mí la lavanda es la maravilla del antiestrés y del bienestar. Es imposible oler una lavanda y no sentirte bien al momento. Esas energías van a generar, no solo tu propio bienestar, una mayor confianza en ti mismo, que generará a su vez atraigas a la prosperidad y todos los buenos momentos que tengan que llegar.

 

 

 

 

 

 

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