«Queremos ser la voz de los mayores»

Ser la voz de los mayores es la prioridad para la nueva presidenta de la Unión Democrática de Pensionistas y Jubilados de España, UDP, Inmaculada Ruiz. Una afirmación que resume de manera explícita el motor que impulsa a esta organización y que busca, además, el reconocimiento y el respeto para un colectivo «que lo ha dado todo». A pesar de que asume esta presidencia con «temor a lo desconocido», reconoce que es mucha la ilusión que tiene para afrontar los retos que hay por delante, como el conseguir «la unión integral de todas nuestras organizaciones». 

¿Con qué ánimo asume la presidencia de la UDP?

Primero con temor ante lo desconocido y, para mí, difícil de realizar. Después he asumido mi responsabilidad con ilusión, con esperanza y con ganas de trabajar y de realizar proyectos y conseguir los objetivos propuestos.

¿Cuáles son los retos principales a asumir? ¿Cuáles los más significativos para 2022? 

Asumir la presidencia de una organización tan importante y extensa como UDP ya es un reto  impactante. Entre los retos más significativos propuestos y prometidos a nuestras asociaciones está el conseguir la unión integral de todas nuestras organizaciones. El lema es «Hoy como ayer, la unión hace la fuerza» . Por otro lado tenemos que volver a ser ejemplo de otras organizaciones. Extender nuestras redes y acoger a todas aquellas agrupaciones que tengan nuestros mismos objetivos.

Ámbitos en los que actuar 

La UDP es una organización muy activa, en permanente análisis de la realidad de los mayores hoy. Según esa mirada, ¿cuáles son los ámbitos prioritarios en los que hay que incidir? 

Mirar hacia las necesidades y vulnerabilidad de las personas. Prioritariamente presionar a nuestros políticos para que vean in situ las grandes carencias que hoy día sufrimos los mayores. Concienciarnos de que la  vulnerabilidad,  la soledad no deseada, el edadismo, la brecha digital no se reducen a discursos sino que es una realidad palpable.

Recientemente la UDP ha dado un paso muy importante al crear, junto a otras organizaciones nacionales, la PMP. ¿Qué supone esta Plataforma y cómo ayudará a vertebrar la actividad de las asociaciones de mayores en nuestro país? 

La PMP nace estratégicamente como un proceso de confluencia de las Organizaciones, Federaciones y Confederaciones de Mayores y Pensionistas más importantes de nuestro país. Tenemos un campo de trabajo muy amplio por delante. Tenemos claro que la Plataforma tiene una agenda que debe precisar bien todas las prioridades. No debemos depender solo de los contactos con el gobierno, sino que hay que dejar claro que la PMP sitúa a la persona en el centro de todas sus actuaciones y objetivos, persiguiendo la consecución del disfrute pleno de los derechos humanos.

«Lo dismo todo y solo pedimos respeto y reconocimiento»

Aunque se ha avanzado mucho en los últimos años, si hablamos de imagen social de las personas mayores, ¿qué queda aún por hacer y a quién le atañe tomar las medidas oportunas? 

Queremos ser la voz de los mayores como tarea prioritaria, estableciendo en el marco de la acción del gobierno una vía de contacto permanente. Queremos ser la voz de las personas mayores y trasladar las verdaderas preocupaciones, necesidades e inquietudes del colectivo. El campo de trabajo  es muy amplio: pensiones, Lapad, cuidados, residencias y centros de día, envejecimiento, etc. Las medidas lógicamente se deben tomar con el apoyo y consenso de los organismos de gobierno.

Los mayores van ocupando posiciones en ámbitos como el económico (también a través del emprendimiento sénior) y el social (por ejemplo, a través del voluntariado). Pero hay parcelas que aún no se abren lo suficiente, como el ámbito político. ¿Es necesaria una mayor representación de este grupo de población a nivel institucional? 

Creo que nuestra representación ha de ser a nivel de organización sin ánimo de lucro, de trabajo de voluntariado de solidaridad y ayuda al mayor vulnerable pero no considero ni creo que es bueno formar parte de ningún grupo político pues ello haría perder nuestra condición de mayores libres e independientes.

Si le pedimos que resuma en solo cinco puntos las aportaciones de los mayores a nuestra sociedad, ¿cuáles serían? 

1. Luchar por el blindaje de las pensiones.
2. Convencer y priorizar que el buen trato es importante y nos lleva a enterrar el mal trato en las personas mayores.
3. La sabiduría y experiencia de toda una vida vivida para «sobrevivir».
4. Económicamente creo que somos el pilar de una economía que ha creado empleo y seguridad a empresas y trabajadores.
5. La aportación quizá más importante es la lucha que siempre hemos sostenido para ganar terreno a una España rota y lograr una mejor vida para nuestros descendientes. Lo dimos todo y hoy solo pedimos respeto y reconocimiento.