Siempre es importante mantenerse bien hidratado, en cualquier época del año y a cualquier edad. Aunque es cierto que algunas circunstancias imprimen más relevancia a esos niveles, como es el caso de las olas de calor extremo que estamos sufriendo este verano, y como es la edad, puesto que las personas mayores son un grupo de riesgo en estas circunstancias. Recordemos que cuando envejecemos la proporción de agua de nuestro organismo va disminuyento, por lo que los mayores suelen beber de forma insuficiente ya que no sienten sed en igual medida que cuando se es más joven.
Aunque a buen seguro que muchos de los consejos siguientes son más que conocidos, nunca está de más recordarlos para asegurarnos los niveles correctos de hidratación, sobre todo en las personas más vulnerables ante el calor.
Consejos del Instituto agua y salud para mantenerse hidratado:
- Mantener unos hábitos de bebida regurales, porque así no solo se mantendrán hidratados, también se asegurarán de un correcto funcionamiento de sus riñones, mantendrán la temperatura corporal adecuada y evitarán el estreñimiento.
- Hay que beber aunque no se tenga sed, sobre todo cuando hablamos de personas mayores.
- Hay que beber de forma regular durante todo el día. Muchos expertos, para asegurar esa regularidad, aconsejan a los mayores beber al menos un vaso de agua en cada comida, y otros cuatro vasos de agua repartidos a lo largo de todo el día.
- Si se toman ciertos medicamentos, como los lazantes, sedantes o diuréticos, controlar más aún la ingesta de agua, ya que estos fármacos contribuyen a alterar el mecanismo de la sed.
- Cuidar mucho las necesidades de hidratación de aquellas personas que, por su incapacidad física, su falta de movilidad, no pueden asegurarse cubrir las necesidades básicas al respecto.
- Del mismo modo, vigilar que las personas con alteraciones cognitivas cubran también esas necesidades y se aseguren unos niveles de hidratación correctos.
