Tienen tus ojos con tu mirada
una sonrisa especial.
La dibujada en la memoria
me la guardo
al latido de tus labios
para besarlos cuando no estás.
Bajas y subes la escalera
y tu perfume queda en el aire,
mezclándose
con las hojas de los libros,
con las pinturas recogidas,
con las velas de vainilla,
con la luz de la mañana.
Sonando el sol
en la tercera cuerda de la guitarra,
que observa cómo lo llenas todo con color,
mezclándose con mi respiración
con la misma sangre de mis venas,
mezclándose con mi corazón.
Tienen tus ojos con tu mirada
una sonrisa especial,
que te hace sentir, vivir
cuando con un baile inventado
me lleno al volverme loco
por verte sonreír.
Mezclándose tu rincón favorito
junto al mío
en la noche en que las palabras se silencian,
dando paso a las del alma
que suaves y ligeras
flotan alrededor de ti, de mí,
y casi sin darnos cuenta
nos llenan,
cubriéndonos de sábanas después.
Te quiero porque me descubres cada día.
Te quiero por descubrirte yo a ti.
Te siento tan dentro porque te quiero.
Te quiero porque te siento muy dentro de mí.
Tienen tus ojos con tu mirada
una sonrisa especial,
la que disfruto cada día
cuando se marcha
y cuando empieza a despertar.
