La XIX edición de las Jornadas celebradas por Caumas, bajo el título Los programas universitarios de mayores, sus asociaciones y el futuro: desafíos y oportunidades, se han centrado en reconocer los beneficios que tienen este tipo de encuentros para todas las asociaciones universitarias de personas mayores.
Este encuentro fue inaugurado por el reconocido jurista Antonio Garrigues Walker, que a sus 86 años nos anima a seguir reinventándonos y no abandonar jamás el espíritu universitario “por beneficioso y divertido”. Las conclusiones de este encuentro son las siguientes:
- Las personas mayores universitarias no han abandonado el aspecto creativo, el mantener la mente curiosa y estrechar los lazos que nos aporta el compartir e imitar las buenas prácticas, para mejorar y avanzar.
- Es un reto histórico el “tirar” de la genialidad para enfrentarnos y dar soluciones a los desafíos, que no solo son los propios Programas Universitarios de Mayores, sino el edadismo, los cuidados, y la soledad que esta pandemia ha intensificado, ofreciendo nuevas formas de comunicarnos.
- Durante la pandemia corroboramos que las personas mayores no han sido consideradas como debieran en la toma de decisiones estratégicas, y por tanto seguimos reivindicando a los partidos políticos nuestra participación, tal y como anuncian en sus programas electorales.
- Exigimos una formación permanente de calidad, acorde con las nuevas generaciones de personas mayores, y que vemos mermadas por “falta de financiación”. En la Universidad, no somos sénior, somos estudiantes, y no vamos a renunciar como alumnos a nuestro derecho, representación y participación “desde la cafetería hasta el Rectorado”.
- Por tanto, las comunidades autónomas deben saber que la Universidad no solo es “una fábrica de profesionales” sino un encuentro de la ciudadanía.
Caumas, como Confederación, ha puesto y sigue poniendo en marcha herramientas de formación -ante los obstáculos- que rompan las barreras impuestas y fomenten la unidad y la reivindicación del talento sénior para estar presentes siempre y que, de una vez por todas, se les oiga alto y nítido.
